18.11.12

Coetzzee

"En opinión de Coetzee, los seres humanos jamás abandonarán la política porque esta es demasiado conveniente y atractiva como un teatro en el que representar nuestras emociones más innobles. Las emociones más innobles abarcan el odio, el rencor, el despecho, los celos, el deseo de matar y así sucesivamente. En otras palabras, la política es un síntoma de nuestro estado de degradación y expresa este estado."
Verano, John Coetzee

16.11.12

...

Puede pasar y pasa. Es inevitable. Resbalas, tropiezas, cuando empezabas a ser capaz de mantener el equilibrio, te caes. Pasa pero sigues adelante. A fin de cuentas el tiempo del que dispones ahora es para eso. Te levantas y abres la puerta a toda esa basura que te cae de la cabeza para que salga volando de tu espacio. Esperas que pase o que encuentres la fórmula de arrasar esos brotes de mala hierba que te nacen del cerebro. Ya ni preguntas qué o por qué porque sabes que no importa. No eres un héroe ni un elegido por los dioses. Tu cabeza no baila con escobas porque esté a punto de parir la idea final que acabe con los males del mundo. Sientes y como sientes, padeces. Haces lo que puedes y no es mucho. Estas enfermo, no sabes lo que dices, vives en una fiebre de pijamas que te paraliza. Quién eres, qué vales, cuánto cuestas. Donde duerme tu alegría, tu felicidad, tus ganas. Dónde se esconde el sexo, dónde ha ido tu belleza, tu alegría, la mujer que eres y no encuentras. Por qué te mueres si te quieren, si te esperan. Por qué te hundes. Por qué sales a la calle y sólo eliges las cuestas que te conducen más abajo, allí donde nadie te conoce ni te encuentra. A qué esperas. Los días pasan. Permaneces inmóvil en la orilla del mundo.

11.11.12

Noches Azules por Joan Didion


Apenas dos horas de silenciosa lectura. Reencuentro con Didion y su historia familiar. Quería, necesitaba saber dónde, en qué punto se encontraba, como quien espera noticias de una vieja conocida. Su marido murió exactamente un año antes que mi padre, de la misma forma absurda e inesperada que mi padre, el 30 de diciembre de dos navidades que cambiaron el rumbo de todo. En ambos casos, uno de los hijos estaba sufriendo ya una enfermedad terrible que  acabaría con ellos pocos meses después. El año del pensamiento mágico fue para mí uno de los pocos libros que puede leer en aquella época y el único en el que encontré el reflejo de mis pensamientos y consuelo. 
Ahora leo, he leído, Noches Azules y ha sido un reencuentro emotivo y desdramatizado con esta escritora que me explica el mundo tan francamente. No sé si es un gran libro, no es mejor que el anterior, pero para mí es una experiencia tan personal que no podía dejarlo pasar. Y llega en el momento apropiado. 
Gracias a M. y a g. por los portes. 

"Te quedan tus maravillosos recuerdos, me decía la gente más tarde, como si los recuerdos trajeran consuelo. No lo traen. Los recuerdos son por definición pasado, de lo que ya no está. [...] Los recuerdos son las cosas que ya no quieres recordar."

"Me prometí a mí misma que no perdería el empuje. No perder el empuje fue el imperativo que estuvo resonando durante todo el trayecto hacia el sur. De hecho, no sabía que pasaría si lo perdía. De hecho, no tenía ni idea de lo que era. Daba por sentado, incorrectamente, que tenía que ver con el movimiento, con viajar, con registrarse en hoteles y marcharse de ellos, como ir al aeropuerto o regresar. Lo intenté. "

"Conservo la fe (que es otra manera de llamar al empuje) en que mis síntomas, que no han dejado de regresar bajo encarnaciones ligeramente alteradas y de momento han tenido una duración más cercana a los cuatro años que a los tres meses, mejorarán, se atenuarán y terminarán por arreglarse. Yo hago lo que puedo para que se produzca este arreglo, sigo todas las instrucciones que me dan. [...] Colecciono buenas noticias y hasta me concentro en ellas." 

1.11.12

Muchacha enigmática

La muchacha de cabellera rizada
dijo que sus cabellos eran serpientes
invisibles para los demás
pero capaces
de escupir fuego invisible
que todo lo incendiaría.

No quedaron petrificados
sino que le administraron
la droga de la verdad
que casi siempre garantiza
que el paciente así tratado
dirá la verdad

Se cuenta que ella no se retractó
De aquella clínica sólo queda un montón de cenizas.

Erich Fried, Cien poemas apátridas.

29.10.12

La Buhardilla de Ezra Pound

Vamos, compadezcamos a los que están mejor que nosotros
Vamos, amigo, recordemos
que los ricos tienen camareros y no amigos
Y nosotros tenemos amigos y no camareros,
Vamos, compadezcamos a los casados y a los no casados.

La aurora entra con pasitos menudos
                como una dorada Pavlova,
Y yo estoy junto a mi deseo.
Y la vida no tiene nada mejor.
Que esta hora de diáfana frescura,
                 la hora de despertarnos juntos.

Antología.
Visor, 1983

21.10.12

Slow your roll



Hoy 40 minutos. Tengo que conseguir llegar al parque Güell. Sólo quien me conoce de verdad sabe lo insólito que resulta que siendo domingo haya salido a caminar. 1+1

19.10.12

Primeros pasos


He caminado mis 45 minutos a buen ritmo por el barrio. Me he dado una ducha y ahora me siento bien. Hago los deberes y funciona. 
Un pequeño paso. Un gran paso. 

Caminar 45 minutos a buen rítmo.
1 actividad al aire libre (hoy llovía)
Leer, brico, whatever...
NO pensar en trabajo, NO hablar de trabajo. 

Mañana más.

17.10.12

Volver a empezar




Aprender a respirar por las mañanas. Ir al médico. Pasear. Visitar dos exposiciones. Tiempo para disfrutar de las imágenes. Seguir caminando. Reconocer que no se puede caminar más y coger sin complejo el autobús. Volver a casa. Comer. Aprender a respirar por las tardes. No pensar mal, no castigarme. Ocupar mi tiempo en descubrir  qué voy a hacer todo este tiempo que tengo por delante además de curarme o qué voy a hacer para sentirme mejor. Tiempo para sentirme mejor. Tiempo para aprender a respirar un día completo. Tiempo para dejar atrás los ahogos, los llantos, los miedos. Tiempo para curarme. Tiempo para poder disfrutar de mi propia vida sin esperar una mejor, aunque un tiempo mejor llegue mientras espero. Aprender a respirar por las noches. Aprender a respirar una semana entera, un mes entero. Comienzos.

16.10.12

Patinando sobre hielo by Enrich Fried

Me he esforzado en ser comprensible
y he intentado hablar de tal modo
que aquello que digo
y por qué razones lo digo
y por qué razones
y con qué fin lo digo
fueran claramente inteligibles
para aquellos a quienes hablaba

¿Pero qué es lo que han entendido?
Recuerdo un chiste
en el que un niño
que llegó tarde a la escuela
echaba la culpa al hielo
afirmando que por cada paso que daba
había resbalado dos pasos hacia atrás.

Algo parecido a lo que me sucedió también a mí.

"Pero entonces, ¿cómo lograste venir?"
preguntó el maestro
"Muy sencillo: abandoné la tentativa
y únicamente procuré
regresar a casa"

Algo parecido me está sucediendo a mí.

Quiero intentar no esforzarme ya más
en ser comprensible.
Sólo intentaré regresar a mi casa, 
al hogar de donde salí y que ya no existe.

En mis tiempos de colegial
me reí mucho
del chiste del hielo

Aún lo recuerdo muy bien.

El oculto


copy: Elliott Erwitt

Tengo que aprender a ocultarme
de mis perseguidores
y empeñado en ello
me acecha un doble peligro

Quizá no esté
suficientemente escondido
de ellos
pero demasiado ya de mí mismo

100 poemas apátridas
Erich Fried

8.10.12

Lo imposible

Hoy se estrena Lo imposible, la película que narra la experiencia de una superviviente del tsunami que arrasó las costas de Tailandia el 26 de diciembre de 2004. Esa misma semana, apenas unos días después murió mi padre. Sin previo aviso cayó fulminado en la confluencia de las calles Diputación y Pau Claris. Mi madre siempre ha dicho que fue entonces cuando comenzó nuestro tsunami. No le falta razón. En apenas diez meses nos golpearon otras dos olas que se llevaron  la vida de mi hermano y la de mi abuela. Nosotras dos nos quedamos en la orilla de nuestra vida de entonces desconcertadas, perdidas.

La protagonista real de los hechos ocurridos en 2004, María Belón, dice: "creo en la maldita suerte". La maldita suerte de la supervivencia. Tener la certeza de que sólo con suerte serás la última en marcharte de este mundo. La maldita suerte que te mantendrá vivo mientras dices adiós a todos los que quieres.

Ahora no puedo evitar preguntarme que fue o que es realmente lo imposible, que lo imposible ocurra o sobrevivir a lo imposible. El hecho o sobrevivir al hecho.

Fue en 2004 y me acabo de enterar.

6.10.12

MI HUERTO ES MUY CUCO I

Cada uno debe encontrar sus propias razones para tener un jardín o dedicarse a la tarea de cuidar un huerto. Da igual si vives en el campo o en la ciudad, de hecho, cualquier inconveniente tiene una forma creativa de ser resuelto. La superación de esas pequeñas dificultades que puedan surgir por el camino, le dará mayor aliciente a tu objetivo. Quizá seas de esas personas que piensan que para empezar cualquier empresa se requiere, antes que nada, un desembolso de dinero importante. Nada más lejos de la realidad. De hecho, lo más divertido de esta experiencia es que pone a prueba tu creatividad. A partir de hoy, os iré contando mis progresos en mi huerto urbano.

Lo cierto es que hasta hace dos años cualquier vegetal que entraba en contacto con mi persona fallecía sin remedio. Pero poco a poco, con paciencia y mucho ensayo-error, he ido aprendiendo los cuidados básicos para procurar una vida media a mis plantitas. Al final como todo lo que tiene que ver con el cuidado y el cariño, el aprendizaje real, el efectivo, es el que viene de la intuición. 
Mi experiencia comenzó a partir de uno de esos anuncios dominicales del Lidl, en concreto, un anuncio de semillas, semilleros, abonos, etc... a precios asequibles. Ahí me fui yo con mi carrito y me hice con un par de semilleros y unos cuantos sobres de semillas. Pura terapia ocupacional. Planté, regué sin esperanza pero con mimo, y un buen día brotaron unas hojitas verdes, que se fueron convirtiendo en plantitas que pude transplantar, y que hoy en día se han transformado en tres tomateras de medio metro cada una( aún no dan tomates pero como son de la variedad "moneymaker" entiendo que con esta crisis estén asustados). Si uno no tiene a priori una mentalidad "verde" este tipo de acontecimientos adquieren la categoría de milagro. Y claro, cuando esto ocurre, cuando uno "da vida" por primera vez, se convierteipso facto en una suerte de Doctor Frankestein vegetal deseoso de alcanzar metas más ambiciosas. Y así fue cómo poco a poco empecé a trasplantar, abonar, leer y practicar, hasta que la jardinería se convirtió para mí en la afición que es hoy. Una terapia que me relaja, me divierte y me aporta muchas satisfacciones. 

Decidida a montar mi primer cajón de cultivo fui poco a poco reuniendo los materiales. Las grandes superficies ya han detectado esta práctica y exponen en la zona de jardinería delirantes estructuras con todo el equipamiento. Son cajones preciosos, resistentes y bastante caros. Seamos sinceros, plantar y regar no es la parte más divertida del proceso. Todo lo accesorio es lo que puedes convertir en algo divertido. Por ejemplo, yo he utilizado un pack de 10 láminas de madera para montar un friso (esas maderas que se ponen para tapar humedades), que me costó menos de 10€ para hacer el borde del cajón. Para el suelo, utilicé tela asfáltica (el rollo de 11 metros me costó 10 euros) pero tonta de mí, descubrí más tarde que las famosas bolsas azules de Ikea se  pueden usar igualmente como base para el sustrato. Con estos dos elementos y unos clavos, tornillos o lo que sea que tengas a mano para mantener fija la estructura ya puedes pasar a la siguiente fase: llenarlo de tierra. 

Un truco: Una caja de clavos te puede costar unos cinco euros. Otra forma de conseguir clavos "de garrafón" pero baratos es comprar en el chino los ganchos para sujetar cables, la gente no conoce lo polivalentes que son. Con unos alicates puedes quitarles la parte de plástico y quedarte con los clavos y usar sólo la cantidad que necesites gastándote uno o dos euros como mucho. Seamos sinceros necesitarías dos vidas para gastar los 500 clavos que has estado a punto de comprar. 

En cuanto a la tierra más de lo mismo. En Lidl en épocas de siembra (septiembre y abril) venden unos sacos de tierra mega ecológica, aireada, con coco, madera y lo que puedas imaginar por tan sólo 2 euros!!! Una bolsa similar de sustrato universal te costará unos 8, 50 € en un chino. Recuerda: EN CUESTIÓN DE TIERRA EL TAMAÑO DE TU HUERTO IMPORTA. CUANTO MÁS GRANDE SEA EL HUERTO, MÁS "DE TODO" NECESITARÁ. Así que te recomiendo que vayas poco a poco y aprendas de los errores de otros : ( 

Una vez tengas todos estos materiales ya puedes pasar una mañana de sábado montando tu cajón de cultivo. Piensa que quizá no consigas plantas pero tendrás un moreno otoñal de lo más seductor.


* pronto (y con fotos) en el blog de El mundo de Gaia, el proyecto de mi prima Eva. 

27.9.12

La medicina me fascina

Cada vez que voy a un médico mi visión de la realidad se trastoca. Hoy, sin ir más lejos, me tocaba visita al cirujano vascular. Desde hace tiempo gastaba piernas de aragonesa o lo que es lo mismo, mis tobillos lucían un grosor similar al de la poco favorecedora combinación de gruesas medias de lana y cinta de alpargata bien ceñídita. Decidida a resolver mi dolencia caí en  manos de Esaú,  mi cirujano vascular. "Esaú, hijo de Ruth, nieto de Abraham" fue lo primero que me vino a la cabeza cuando oí su nombre. Pues bien, Esaú, Esaú, cuando mueras que harás tú, me ha practicado esta misma tarde un eco doppler venoso. Y la escena ha resultado impagable. Ahí estaba mi Esaú, subiéndome la falda y pasándome el ecógrafo downton abbey, mientras yo posaba con la pierna de lado y las manos apoyás en la cadera. La vida te sorprende con momentos de inusitado erotismo. La buena noticia es que estoy bien y que me hincho porque bueno, el patio no está para menos. No tengo que volver (lo he preguntado imagino que debido a la sinrazón que provoca éxtasis o el desconcierto, ahora dudo) y al menos ahora, después de tan emotiva experiencia, gracias a Esaú ya sé lo que me corre por las venas. Por eso insisto, la medicina me fascina.

2.9.12

Terapias alternativas


Septiembre está aquí. Ha llegado el mes de la siembra y dicen que el que siembra, recoge. Esta afición, que ya se consolida, ha sido todo un descubrimiento. Mascotas, vegetales, pronto, quién sabe si humanos. Gracias a M. y tras zambullirnos en una orgía de tornillos, soportes, listones de madera, ingleteras, sierras y demás perversiones bricoladoras, ya cuento con luz en mi terraza. Muy pronto convocaré a los superhéroes para celebrar la llegada del mejor momento del año: el otoño en Barcelona.

21.8.12

Persápolis

Podría ser peor. Podría ser un gato persa. Podría ser un gato persa híbrido de león y gato. Sí, sin duda eso sería peor con estas temperaturas. Estoy al cuidado de dos leones en miniatura y, con este calor, uno comprende que en la sabana africana no es que no haya nada que hacer, es que no hay quien pueda. Marcello y Greta, mis leones, se tiran en el suelo y aunque beben y beben y vuelven a beber, no hacen más que jadear. Claro que yo estoy más o menos igual y no tengo excusa. O sí. Una insana ola de calor asola nuestras costas y no hay quien duerma ni quien tenga ganas de despertarse. Si llueve, me mojo pero es que ahora, si me muevo, sudo. Me derrito como una mala cosa.
Como esto siga así, me aliño a lo bonzo y que me barbacoen sin contemplaciones. Yo, que he sido "trufada" desde mi más tierna infancia por mi progenitora, estoy considerada pura delikatessen caníbal. Quién sabe, a lo mejor hasta tengo un futuro en la cava de jamones de aquí abajo. Total, la cosa va de colgarse de un gancho y sudar hasta curarse.
MIentras me decido, rocío con agua a mis gatúmenos y me siento Shakira sudando litros en el escenario. Quien no se consuela es porque no quiere.

20.8.12

El patio de mi casa es particular

Poco a poco las persianas de mi patio van abriendo los ojos. Es verano y apenas parpadean. Casi todas las ventanas duermen. Sin embargo, aún permanecen abiertas pequeñas tramas vecinales. La niña de seis años que es pura energía y que desgasta la paciencia de sus padres; el señor Arrugas, un hombre mayor que vive solo y que también elige las tardes para sentarse en una silla en el balcón situado frente al de la niña, con una serenidad que solo los años hacen posible. De alguna ventana del fondo llegan aires de reggaeton, el más hórrido de los ritmos latinos, el único sonido capaz de viajar a una velocidad superior al resto, un sonido para ser escuchado sin excepción. Una música que de haber sabido que sería creada hubiese sido motivo suficiente para hundir la Pinta, la Niña y la Santamaría de un cañonazo. Afortunadamente, algunos días se escucha el piano de otros vecinos de la orilla izquierda del patio. Incluso he creído detectar a una cantante de ópera muy al fondo. Tendré que esperar a septiembre para que vuelvan todos a salir a escena. Mientras tanto, las turbinas de la cava de jamones siguen girando y, por las tardes, emana cierto olor a ibérico de lo más agradable (a veces, las cosas se vuelven mejores por eliminación). Es entonces cuando algunos vuelven de la playa y cuelgan toallas y bañadores en las cuerdas esperando a mañana. Después llegarán las cenas, la luz en los salones, algún intento de aplacar el calor agotando las palas de los ventiladores. Cuando todo fracase será el momento del sueño, del caer de persianas y pestañas, el momento en el que todos, poco a poco, iremos cerrando los ojos y las ventanas.
Disfruto de esta rutina.

Yo, robot



Cuatro intentos para dejar un comentario en el blog de S. Incapaz de acertar al interpretar el código que aparece bajo la frase "Demuestre que no es un robot". Conato de crisis existencial.
Yo, Robot. Tú, Jane.

19.8.12

New directions



Sí, ayer se produjo el avance definitivo: confundí el sábado con el domingo, un síntoma claro de estar de vacaciones. Me dedico a mí plenamente. Me obligo, me disciplino, me mejoro. Esto es serio y tengo que hacerlo bien. Fui al gimnasio y me dijeron que volviera en otro momento. Sin embargo, no fue algo personal, estaban revisando tarifas y arreglando la espectacular piscina de 25 metros en la que me zambulliré en septiembre. Me he rapado el pelo. Me he quitado la capa lateral y he renunciado definitivamente a mi fingida y pretendida blonde ambition. Estoy empezando de cero. Me queda camino pero he cambiado de dirección y las mejoras son sustanciales. Y sí, estoy entregada a decorar y reformar mi pisito, vivo con dos gatos que se pelan por mi cariño y con los que juego en la terraza por las tardes. Las convalecencias se dejan atrás con placeres sencillos. Mi bienestar pasa por aquí.

12.8.12

Mis musas


He encontrado a mis musas. Venga, Cova, tú puedes!!! Me quedan tres semanas para descansar. Wow! Vamos a por esa actitud!

7.8.12


Plantarse así, en medio de la acera respetable. Plantarse, asumir que no se puede más y derrumbarse dramáticamente primero, provocando a la autoridad después. Tengo la sensación de que se me han fundido los plomos. Creo que deberían haberme despedido y, que no lo hagan, me confunde. Me siento como un mal resto de serie, un retal de lo que soy. Agotada, naúfraga, destruida. No volvería. Necesitaba descansar antes incluso de llegar a este punto de inutilidad absoluta. Toca ruta de médicos, sol, descanso, algo de soledad y algo de amigos. Estrenar la terraza, qué ganas. Que llegue mi tumbona y quedarme dormida mientras escucho música los lunes, los martes, cualquier día al sol. Poco a poco volver a escribir en condiciones y atreverme a cambiar de profesión. Estoy agotada. QUedan cuatro semanas por delante. Quizá tenga una gran idea. NUnca se sabe.

19.7.12

Esperando un respiro

Me cuesta recordar un momento en que haya estado más cansada que ahora. Me cuesta, pero tampoco tanto. Me duelen las articulaciones y el corazón. Sin embargo, sé que en cuanto pase este malestar físico podré centrarme en el emocional sin problemas. Es broma. En realidad, me siento fuerte emocionalmente aunque haya perdido toda mi credibilidad. Estoy convencida de que podría ser feliz en mi terraza, tomando un café y charlando con un amigo sentados "a las butacas" del patio, bajo un árbol de Júpiter que he puesto allí y que está en plena floración. Sé que podría disfrutar de una cena o incluso, en un alarde, organizar un día de barbacoa para toda mi gente. Solo tengo que encontrar el tiempo de descanso. Estoy a menos de quince días de encontrarme en "el sitio de mi recreo".
Puedo decir que han sido seis meses exigentes, agotadores y muy productivos. He aprendido mucho sobre los demás, sobre la pérdida de tiempo que supone crearse expectativas sobre personas y cosas. Es necesario un blindaje mínimo, invertir en lo nuestro y en los nuestros, querer a los mismos mucho y compartir con ellos. Y dejar que se acerquen a ti.

17.7.12

Ay, ¿quién maneja mi plancha?

Acabo de emitir una orden de busca y captura para mi plancha. Ahora, que tras semanas de mudanza, semanas de aquí-te-cojo-aquí-te-en-cajo-allí-te-dejo, allí-te-des-encajo, ahora, que por fin lo nuestro ha terminado... sigo sin encontrar mi centro de planchado. Encontré los peines y peiné la zona, pero no deshice los nudos del misterio. Levanté muebles como quien tala troncos, como quien come palillos, pero sin éxito. Mi plancha se esconde en algún lugar de una casa que no la reconoce. Como no tengo perros, he soltado a los gatos, pero no han vuelto. Cada domingo espero, desde entonces, que en el Lidl oferten georadares ¡por muy poco dinero! a ver si así  logro dar con la muy bastarda.
Es una pena que ahora, que hace tanto calor, que da tanto gustito sudar si se plancha, y abrirse las carnes y abrise los poros y hasta abrise de patas... qué pena que no encuentre, que no sepa ay, ay ¿quién maneja mi plancha?

9.7.12

Sola, ¿qué tal?

Necesitaba un sofá, un par de taburetes, encontrar una buena oferta para unos muebles de jardín. Fui el viernes a primera hora de la tarde a IKEA. Valiente. Tomé mis referencias, hice mis preguntas y descubrí que sólo quedaba una funda azul turquesa para mi sofa. Fingí indiferencia. Rápidamente bajé a la zona de recogidas. Poco a poco, disimulando entre la vegetación de la última sala, avancé por el pasillo 6 hasta el nº55 para descubrir que si me hubiese puesto histérica quizá hubiese tenido una oportunidad. Ante todo mucha calma. La funda Alme, neutra, como era de esperar no estaba bien ni mal, era de un no color pero suficiente para cubrir la estructura. Le pedí a un "superfuerte" con camiseta amarilla que me subiera el sofá al carrito. Lo hizo y me dejó en el pasillo abandonada con mi carga. Pero no, no me amilané y seguí con mi objetivo. Perdidas las referencias de los muebles, intactas las espacio-temporales, y sudando ya como toca en estas grandes superficies, me fui al pasillo opuesto por mis dos taburetes. Bien. Los puse al lado del sofá. De repente, divisé una mesa de jardín extensible hasta 2,60 metros a un precio de risa y decidí previa consulta con mi mecenas en este artículo, cargarlo también. Más complicado. La mesa pesaba un kilombo y a duras penas conseguí subirla al lateral del carrito. Mientras, como pasa tanto en estos días, las parejas me pedían que dejara de impedirles el paso de camino a la caja. Y yo, una suerte de luchador de sumo y contorsionista, intentaba subir los bultos al carrito... sin frenos. Quedaban las sillas. Seis sillas de forja y madera a razón de 9,99€ pieza. y, muy importante, plegables. Cualquiera hubiese visto claro que era el momento de coger otro carrito, cualquiera que fuese, por ejemplo, amigo de Bob Esponja y tuviera ocho tentáculos en vez de brazos. Al no ser el caso, decidí continuar con mi monoplaza y cargar sobre el sofá las seis sillas y una pequeña salamdrita de peluche encima de estas... por joder. Y así, como un costalero de la virgen de los solitarios, me fui poco a poco, MUY poco a poco acercando a la caja. Detrás de mí una señora con 1 cojín para silla de jardín y a ambos flancos dos cajas exprés para aquellos con menos de 10 artículos. Sin embargo, ella permaneció inmutable detrás de mí. Llegó mi turno, pagué, le aclaré a la cajera que por más que rodeara mi construcción no encontraría a nadie y que dejara de hablar en plural y que por supuesto, no había traído coche. Abadoné la caja mientras la cajera sacaba el cuerpo y me decía: venga valiente, que lo vas a conseguir! faltó que alguien se me echase frente a mi "paso" a cantarme una saeta. Llegué a la zona de envíos. Me separé un metro a coger mi turno. Me separé un metro y sobreviví porque justo en ese momento, las sillas decidieron precipitarse contra el suelo. El estruendo fue tal que como en un musical toda la actividad de IKEA cesó en ese momento. Sólo se vió mi corazón cayendo del cielo como un cohete que desciende vertiginoso después de explotar en el cielo. Viva, fui rescatada por un mozo no tan mozo con cinta americana que ató las sillas al resto del equipaje y me dijo: "Esto ustedes tienen que ponerlo en dos carritos." A lo que me vi obligada a contestar: Pues no hay "ustedes" solo yo, así que se queda en un carrito". Quientemealloboferoz.com  Y así, después de pagar un pastizal por los portes fue como cogí mi autobús, a salamaquez y me fui a casa. Sola, ¿qué tal? Estupeda, oye.

6.7.12

water u doing

Ya tengo agua, fría, pero fluye y como a toda psicópata que se precie de serlo, me sienta de maravilla. Ya me he mudado y en mi nueva casa voy a ser muy feliz. Tengo todo lo que necesito y nada más. No me sobra ni me falta. Tengo futuro, proyectos, esperanzas y sé que poco a poco, según llegue la calma, el descanso, el agua caliente, sé que poco a poco me sentiré mejor. Marcello está feliz en su nuevo ranchito por lo menos hasta hoy. Mañana llega Greta, la gata de Maremeva que es opuesta a él no sólo en el color sino en la actitud. No sé que pasará con semejante loca de la casa pero sé que será divertido y algo arriesgado. En cualquier caso será bueno. Y tengo a mis amigos cerca, qué más se puede pedir.

26.6.12

Birdy que te quiero Birdy


Birdy trigo, Birdy rama. Pues sí, así es la cosa, pasaría las noches en mi palito cual Birdy, mientras mi cuerpo asimila los cambios de, por qué ocultarlo, la nueva medicación. Sí, conmigo los versos cambian y cantan: ay, medicación, tienes nombre de mujer. Antes del sueño, mi corazón late, mi femoral late, como si fuera un cachorro recién nacido. Taquicardio sobre el colchón como un indio patea el suelo invocando a la lluvia. Y luego, hago dobles tirabuzones, me estiro cual estrella de mar, mientras Marcello "el gato de la curva" se acamala en mi cintura. Él se coloca allí y yo siento que está, al menos, de testigo. Taquicardio hasta caer rendida. Me repito esas palabras que como un mantra cariñoso alguien me repitió hace muy poco mientras yo nadaba entre lágrimas: "lo estás haciendo bien, lo estás haciendo muy bien." Y poco después llega la calma y a veces incluso el sueño. Cuando despierto parece que me hubieran atado con cinchas a la cama. Me duelen las articulaciones, la columna vértebra por vértebra, y mis ojos son carne de cuchilla y perro andaluz incapaces de abrirse de tan hinchados. Son los cambios, los monos, fuking primates, las abstenciones de tanto Lore and the zepams. Pasará, pero esta gimnasia pasiva me deja agotada y me despierta mi Amedio interior reclamando su próxima dosis. Sé que va a ser para mejor, sé que merece la pena este dormirme tan cansada al arrullo de los versos: Birdy que te quiero Birdy, Birdy trigo, Birdy rama. 

25.6.12

qué ganas

Pero qué ganas de llegar a mi casa nueva, de despertarme en mi nueva habitación. Ya estoy sólo a cinco días y tengo ganas de estar allí. Ayer llevamos a las plantitas. Es incríble la importancia que ha cobrado lo verde en mi ecosistema personal. Qué ganas de soltar a Marcello para su desconcierto y mi histeria en la terraza y poder así jugar juntos. Qué ganas de ponerme a pintar el baño e instalar el suelo. Qué ganas de poner la carpa en la terraza, la mesa, las sillas e invitar a mis amigos a pasar el rato, la tarde, a estar al sol o a la fresca para comer un pollo un domingo o dormir una siesta en grupo. Quíén sabe. Es una casa pequeña, es un patio grande, es una nueva historia que comienza y que me llena de esperanza.

23.6.12

Clara, la mujer bombeta

amanece con el pelo revuelto y los pies desnudos, esos pies diminutos, peuspetits; esos pies tan de hobbit, como le gusta decir. Clara es "de comé",  "de dormíl", "de queré", por eso son sus cosas esas cosas del querer. Diseña hermosas bombas racimo de cariño porque a ella, tan pequeña, tan bombeta, le gustan las cosas a lo grande, incluso a lo bestia, si le dan a elegir. Tiene algo de criatura de fantasía, ciertamente, cambia de tamaño, encuentra el hueco, tiene superpoderes que, entre otras cosas, le dan una fuerza hulkiana que nadie se explica, porque a nadie le caben tantos kilojulios dentro. Nos reímos juntas. Juntas chapoteamos sobre las palabras cual "cerded" en su charquito de barro. Y me ve, porque también ella es mucho "de fijaLse" y me guarda y me vigila y me tutela como un perro pastor o un san bernardo. TIene gracia porque la san bernarda soy yo ( otra frase para nuestra colección de camisetas) que le saco nueve años y un par de cuerpos. Pero la naturaleza es caprichosen. Ah, es la tía de Marcello, la versión gatuna de su espíritu de chorlito. Y chorli, clarex, peuspetits, clarabee, petit claire, etc is absolutly in love with g. a quien llama chxxxx con todo su amol de ese, del de querel. Hoy es su cumple, día de San Juan, el último como veinteañera. No extraña que sea carne de verbena, mitad mujer, mitad bombeta. 

FELICIDADES.
Suertequetengo.com.

22.6.12

“We can spend our lives letting the world tell us who we are. Sane or insane. Saints or sex addicts. Heroes or victims. Letting history tell us how good or bad we are. Letting our past decide our future. Or we can decide for ourselves. And maybe it's our job to invent something better.” 
― Chuck Palahniuk Choke

Aprendiendo a volar sobre el nido del cuco



Buscar la cuadratura del círculo parece delicado. Oblonga como soy y me presento, me resulta imposible por naturaleza encerrarme en un caja, un cuadrado o nada que resulte cartesiano. No tengo alma de monje trapense. Ni siquiera me gustan el turrón o los mazapanes. Me resulta imposible avanzar en este entorno. Dios sabe que pongo todo de mi parte, dios me ignora, dios se vuelve minúsculo y después, desaparece. Soy diferente, casi leyenda. Me ahogo, me enfermo, busco muletas para poder caminar ya que, según dicen los que observan, esto no siempre va a ser así, esto no va a durar siempre. Sigo caminando, porque según dicen, en algún momento la carretera se desvía hacia un área de descanso. Un área de descanso ahora sería la tierra prometida. Mientras tanto, en mi interior, se que todos los caminos conducen al mismo punto. Esto no va, esto no funciona, esto me está destruyendo poco a poco. Por más semaneras que utilice, por más ilusiones que me invente, esto no cambia. Solo yo debería poder decidir cuándo dejo de caminar o cuándo me quedo en el arcén descansando. Aquí no hay albergue que valga. Llamo a reunión a todas mis fuerzas con la misma desesperación con la que los peces acuden por la comida. Soy un perro con sarna al que todo se vuelven pulgas, o algo así; una piñata mejicana a la que hundir a golpes, alguien que intenta aprender a volar sobre el nido del cuco.

12.6.12

Sleeping, sex or bacon


Hasta que pase


¿Qué es lo que estás buscando?¿Qué necesitas? ¿Qué tiene que suceder para que las cosas cambien? Mi desesperación os hace vulnerables. Mi frustración os sobrevuela. Alejaos de las ventanas, tomad medidas. Os lo advierto: no dejéis que mi tristeza nos arrase. Esta lluvia fina que me desgasta, que me cansa, que me enfada, tiene que parar en algún momento. Esperad hasta entonces. Pasará esta luna llena que me deforma y no mengua. Poneos a salvo. Ignorad mis lágrimas. No me escuchéis.  Mi miseria os arrastrará conmigo si no puedo, si no consigo evitar que se desborde este tanque. Dejadme sola hasta que esto pase.

10.6.12

Nos mudamos

Once again: nos mudamos. He comenzado con las cajas. Me fijo objetivos pequeños: desmantelar cocina. NO tener piedad con aquello que no me pienso llevar. Las mudanzas son para eso. Y yo cada vez quiero volar más ligera de equipaje. En mi nuevo piso pienso vivir al fresco, vuelta y vuelta. Lagarterana sin complejos. Debo volver a las cajas. De fondo, Adele suelta toda su rabia y se carga todo el menaje.
Tomo ejemplo y me pongo al tema.

31.5.12

Qué esperar cuando estás esperando

Esta semana he recorrido la avenida Diagonal en ambos sentidos más veces que en los últimos diez años. Ni siquiera en reposo parece que esté quieta. Mi mente, sin embargo, se bloquea. Me siento incapaz de concentrarme en cualquier actividad. Llego a casa, ordeno, me entretengo, perfecciono mi gazpacho y pienso en tooodo lo que puede cambiar y tooodo lo que puede permanecer de la misma forma. No me asusto. Todos los caminos conducen a mí y eso es el fruto de un duro trabajo. Tengo grandes amigos, más que eso, tengo una gran familia.  Mi familia también me acompaña ahora en mi vida. Y gracias a la tecnología Marcello y yo también estamos más cerca de Bianco y su amita argentina. Me siento afortunada. Ahora solo querría poder tener un lugar en el que recibirlos a todos, acogerlos, celebrar con ellos. Es cuestión de días y de hiperventilar un poquito todo más. Esto es lo que espero mientras estoy esperando.

28.5.12

Mal karma

No lo entiendo. De un tiempo a esta parte noto que desde distintos foros insisten en que me prepare para la Eurocopa. Me confunden. ¿Qué desgracias me sobrevendrán si mi pantalla no es lo suficientemente plana o si no me intereso en seguir los partidos?¿Peligrará aquello que amo?
Los mensajes llegan cada día a mi bandeja de entrada con los telex al Titánic. Estos mantras me enajenan y me extrañan. Prepárate para la Eurocopa, desconfía de los Idus de Marzo, si las barbas de tu vecino ves crecer...
Aquí lo dejo. Como los que reciben amenazas y lo cascan por la tele. Prepárate para la Eurocopa. Qué cosas...

26.5.12

INVENTARIO

Haciendo inventario de todo aquello que puedo dejar atrás. Pensando en la posibilidad de dejar de acumular para empezar a aprovechar lo que tengo al máximo. Invertir en mí, en mi salud, en mi tranquilidad, en mi alegría. Optimizar recursos. Tengo tres días para marcar todo aquello de lo que me quiero deshacer. Incluso si no se produce ningún cambio notable, necesito despejar mi entorno, librarme de todo aquello que no me pertenece y que simple se amontona en las esquinas, debajo de los muebles. Necesito un equipaje ligero para un cambio de actitud, poner los medios para ser más solvente y poder alcanzar a los que quiero, recibirlos, hacer viajes con ellos y sobre todo viajar yo, aprender yo, estudiar yo, pensar, escribir, crear, tener ideas, imaginar y hacer que valga la pena. Sin embargo, en paralelo, hago de tripas corazón y retengo las ganas de empezar a soltar todo el lastre que acumulo por si los tiempos no son los que espero. En unos días podría liberarme de un peso que ya no tiene sentido seguir cargando. Voy a aprovechar toda esta energía para hacer zafarrancho y planificar cuidadosamente los siguientes pasos. La felicidad se sirve de cuidadas estrategias. Y eso es ahora en lo que necesito trabajar a conciencia. Al final está un espacio en el que celebrar vuestros cumpleaños, recibiros como merecéis y compartir con vosotros mi felicidad venidera. En eso trabajo. Ha llegado el momento de soltar amarras con el pasado. Sé que mi alegría es lo mejor que más alegrará a todos aquellos que me apoyan cada día sin descanso.

17.4.12

No time for "mariditos"

Algunos detalles nos pasan desapercibidos. Algunas necesidades también. El otro día me percaté de que se me había olvidado casarme, más o menos, hace cinco años. Sencillamente no me di cuenta. De haberlo hecho entonces quizá hoy aún seguiría feliz con mi maridito y, feliz con mi maridito, con sueldito quizá ahora podríamos permitirnos que yo mandara a la mierda mi trabajito mientras me sale otra cosa, por decir algo. Sí, un maridito me vendría de perlas. Sí, un maridito con todos los extras incluida cuenta corriente y moliente pero conjunta, eso sí. Yo llegaría a casa y acurrucada en mi maridito le pediría que no me obligara a volver mañana. Se lo diría mimosa, y mi maridito, loco por mí como estaría, me daría un besito de maridito y me haría unos mimos, también de maridito, que me vendrían de perlas. Sería genial tener un maridito. Pero se me pasó en su momento y ahora ya voy tarde. No time for mariditos, ay no más lo dejo, señores. Chau.

10.4.12

Regreso a Tara

¡Newyorkers de ojos rojos! No estáis solos. Todos tenemos jet lag después de las vacaciones de SS. Servidora salió a la calle con la cazadora dada la vuelta al punto que el paqui del barrio me recibió partiéndose la caja, tanto, que mientras me cobraba me hacía comentarios en indi y no se daba cuenta. Y eso que en su país las vacas semos sagradas. Eso me pasa por madrugar para coger el AVE de vuelta. Eso me pasa por hacerme mechas rubias riannheras, que me atonto, me adoceno, me desprendo de mi yo consciente y me abandono a mi nueva actitud de chica sureña. Sí, como Scarlett O'hara después de todo mañana será otro día. Me consuelo con nuevos descubriemientos como el de hoy, cuando me he dado cuenta que he mutado en algo parecido a veterinaria tratando de hacer viables un par de libros que como los ternerillos vienen de patas. Hacen falta arrestos para tamaña tarea, hace falta alguien que pueda decir cosas como éstas. Así, mientras pienso en los días felices cada vez con menos nostalgia, asumo mi nueva condición de chica sureña. Olvido todo lo que huela a siglo XXI y vuelvo al origen, a la tierra roja de Tara. Ah, el jueves fumigan mi ranchito. Estamos en abril, tiempo de nutrir las cosechas para que germinen. Vendrá el verano pero nuestros riñones no serán los mismos. Jesús, qué crisis!

4.4.12

Sol y los caracoles

Como siempre que llegan estas fechas, los superhéroes viajan en todas direcciones. Este año un escuadrón ha salido en dirección a NY. Mientras tanto, dos jardineras, profesional y amateur, se quedan guardando de los dos polos del planeta. Quien sabe si lo nuestro sea otra forma de echar raíces. Gatos opuestos, polos opuestos y una afición convertida en profesión. Este lado del mundo despertó gris y lluvioso y me dió por pensar en vos. Emito cariños, hago danzas rituales para que salga Sol. Sol y los caracoles,espíritu pop para animar el día.

28.3.12

Huelga decir...

Ayer abandonaron el edificio colchón, tablero, cabecero... Aspiré chinches muertas bajo la cama. Hice lo que tenía que hacer.  El sábado corte de pelo, el domingo a Madrid. Vacaciones, descanso, mimos. Pensar, pensar y dormir. Recuperar las fuerzas que me faltan, el orgullo, la fe, la esperanza y la caridad, que tanto echo en falta y que tanta falta me hacen. Pero para empezar, mañana, huelga decir que haré huelga.

22.3.12

Invasión y victoria

No, esta vez no voy a esperar a que una chinche me muestre su documentación como ciudadana europea para tomar medidas. Esta mañana me levanté con una picada diminuta en la cara, en las piernas, en el pecho. Y aún no ha llegado el calor en serio. No. Voy a tirar la cama, el soporte, el cabecero aunque me duela perderlo. Voy a poner dos bombas mata chinches y me voy a ir de vacaciones a Madrid con Marcello. Le dejaré allí, solucionaré mis problemas logísticos y me lo traeran de vuelta en Sant Jordi. Ya está todo bajo control. Todo lo que puede estarlo, claro. Mi moral anda un poco por los suelo. Un respiro. Solo un respiro, por favor.

20.3.12

Mi vida en slow motion

Voy y vuelvo. Soy afortunada. Más allá de mí, mi fortuna son los otros, otros cuyas opiniones respeto, de cuyas mentes me fío. Insisto en ir hacia la luz desde niña. Me atraen los finales de los libros, de la personas, de la vida, vivir sin estar, hacer malabares. Me gusta cantar y no canto; nadar y no nado; bailar y no bailo; soñar. Desprecio la realidad que me toca por sistema, por caracter. Esa es quien soy. Ese es mi motor. Vivir sin estar. Mantener la distancia suficiente de las cosas para que no me alcancen y sean. Así es como consigo esquivar los problemas. Soy feliz estando ausente, soy feliz no siendo. Me maravillo con cien cosas distintas a cada segundo. Se lo que va a ocurrir casi a cada segundo. Escucho lo que la gente dice a través de lo que no cuenta. Los veo tropezar intentando no dañarme. Me quieren. Se esfuerzan. Se que sienten darse cuenta como yo me doy cuenta, ser también conscientes de lo que me ocurre. Me protegen. Lo hacen porque me quieren. Me siento querida, me siento sobre querida. Muchos no tienen eso en sus vidas. Yo me siento diferente porque yo misma insisto en serlo. Si supieran ellos cuánto los quiero, que los quiero tanto que estoy dispuesta, lista, preparada para perderlos a todos, uno a uno a cada momento. Si supieran que los quiero cada día durante las veinticuatro horas del día, a cada segundo. Si supieran que los quiero de segundo a segundo. Eso es lo que puedo ofrecerles, lo que les doy cada día. El resto es ausencia. EL futuro es ausencia. El futuro, mañana, es la pérdida de lo que siento hoy. Lo que soy no es compatible con la vida. No soporto la sicronía en cuestiones de afectos. Como en una gala televisiva, necesito una distancia de unos cuantos segundos para reaccionar como toca si los pierdo. Eso es lo que soy, lo que he vivido, lo que seguiré siendo. Llego a mi felicidad un poquito más tarde de lo que llegan ellos y los descubro allí con mi alegría y el regalo es doble. Necesito ese retardo, la vida en slow motion. Se que todo va bien, se que lo que pasa ocurre porque es necesario. Se que tengo que sentirme bien, afortunada, conseguir disfrutar de este cambio. Y se que aquellos a quienes amo, aquellos que antes de que yo esté, ya están, saben que siempre lograré encontrarlos.

Voy y vuelvo

A pelo el ambiente se vuelve irrespirable. Es entonces cuando mi voluntad y yo nos agazapamos tras la pantalla del ordenador ocultas tras una mini trinchera de libros creada ex profeso. Tal y como he dispuesto mi ordenador, ahora solo se me puede oir llorar pero no verme. No ofrezco primeros planos. Fotos no, fotos para nadie, como la diva que soy. Si no fuera porque no vería una mierda, trabajaría con gafas de sol. Solo necesito mi propio muro de Berlín, mi franja de Gaza para no ver mi pasado sentado frente a mí. Que lo entienda quien pueda. Ahora escribo en negro, profeso religiones que antes negué y mi indignidad no conoce fronteras. Soy voluntaria (no voluntarista, que yo se lo que me hago), quiero decir que musculo mi voluntad cada día y la echo a correr hasta que se presenta al final de día frente a mí, con la lengua fuera pidiendo clemencia. En ese momento, se que ha llegado la hora de guardar el tablero de Jumanji y avanzar a través de las enredaderas hasta el torno de salida. Y así pasan los días. Las mejores historias suceden en los autobuses. Solo por eso voy y vuelvo.

19.3.12

#67

Dos conductores de bus se lanzan besos en los semaforos rojos. Ella le dice q se cuide mucho. La chica rubia tb llega tarde. El dia así parece inofensivo.

15.3.12

Nesun Dorma

No hagamos de la vida un drama tan solo porque somos capaces. No nos dejemos vencer por la desesperanza. No nos creamos eso que de lo que todos hablan. Nada de lo que nos dicen es cierto. No estamos perdiendo batallas. No somos perdedores. No nos han vencido. Si somos capaces de ser felices ahora no nos habrán vencido. Nos están obligando a jugar una partida sin repartirnos las cartas pero sabemos contar. Nos asaltan fantasmas cada mañana. Nos llaman a una rebelión sonora y nos tienden mil trampas. Guardemos silencio. Seamos estrategas. Nesun dorma. Si somos fuertes, cuando esto termine, habremos vencido.

Yo iba de peregrina...

y me cogiste de la mano. Como escriba "hermosa andadura" una vez más esta semana, no respondo. Voy de cabeza hacia la luz y armadita hasta los dientes. Ay si eu te pego, Coelho...

14.3.12

El presente es todo lo que tenemos

Voy en el autobus y caigo en la cuenta de que la mayoría de las chicas que viajan conmigo no les saldrían las cuentas si, como yo hice ayer, dividieran su altura por su peso para averiguar su índice de masa corporal. Demasiada masa corporal para uno solo. Sin embargo, tanto ellas como yo intentamos sentirnos hermosas. Bajo en mi parada. Como siempre que paso cerca de un hospital miro con curiosidad las caras de la gente apostada en sus puertas. Pienso sin nostalgia en cuando fui uno de ellos y continúo caminando con cierto aire de suficiencia, con superioridad, rebañando el plato de mis miserias. Pienso en Dios y en si se merece la mayúscula con la que se le distingue. Pienso en Dios y concluyo que es el peor el estilista del mundo o un ingenuo. Un poco de sol y unos pájaros no son suficientes para comenzar el día con una sonrisa. La felicidad, nuestra felicidad, depende solo de lo que seamos capaces de inventar para disfrutar de ella. A pesar de que hayan cerrado las fronteras, de que resulte imposible abandonar Estocolmo. Estocolmo es ya un gueto en el que resistimos unos pocos privados de la capacidad de elegir nuestro futuro. Sin embargo, renovamos nuestras ilusiones no sin esfuerzo, intentamos depositar la esperaza en lugares secretos donde nadie la alcance. Es complicado. Elijo el optimismo de la voluntad frente al pesimismo de la inteligencia, me dijo un amigo hace unos días. Así que cada día me levanto y lo intento de nuevo. Sé que nada de lo que tenemos ahora es suficiente. Sé que todo lo que nos pasa ahora no es justo ni está en nuestras manos. Sé que nos están robando el futuro, que ya lo han hecho. El presente es todo lo que tenemos. Luchemos por eso.

28.2.12

Abandonar Estocolmo

Termino el índice, enumero las notas, separo capítulos y comienzo a leer por segunda vez. Ahora, por fin en silencio me doy cuenta de qué sentido tenían esas comillas y me decido a borrar mis notas a lápiz en los márgenes. Sin embargo me doy cuenta de que no tengo una mísera goma de borrar. En una casa donde uno puede encontrar todo tipo de gadgets esto resulta ridículo. Pienso en la miga de pan como alternativa, y me doy cuenta que aquella lectura compulsiva del Manual de los jóvenes Castores no fue en vano. No tengo goma de borrar y son las ocho de la tarde. La idea de esperar doce horas me parecería terrible de no ser porque tengo cosas peores en que pensar. Cosas peores o no, según se mire. Quizá cosas más complicadas. Decisiones unilaterales. Cable rojo o cable verde. Si me equivoco haré chas! y apareceré a vuestro lado. Hasta Marcello me mira desconcertado. Trae en la boca su juguete hasta el salón y lo suelta frente a mí. Marcello es un gato pero es un gato algo tenso esta tarde. Tenía previsto llorar pero soy imposible y me sale mejor con público. Iba a dedicar la tarde a compadecerme de mí misma pero no me sale. Nadie me va a decir lo que quiero oir o lo que debo hacer. No hay nadie a quien echarle la culpa si me equivoco, si algo sale mal. Supongo que la madurez era esto. Yo seré la responsable de mi decisión para bien o para mal. Sé que no aguanto más el trato que se da a la gente en mi lugar de trabajo. Me doy cuenta que no estamos programados para tomar decisiones unilateralmente. Pienso en lo mejor para mí y tengo remordimientos de conciencia. La última de la fila. Debería haber montado un grupo en los ochenta. Pero algo bueno ocurre: después de meses estoy aquí otra vez escribiendo lo que siento sin importarme quien lo lea. Estoy triste, asustada y a la vez siento que soy fuerte. Y lo soy más aún porque sé que no estoy sola. Esta vez creo que incluso cuento conmigo misma. QUizá sea ya hora de abandonar Estocolmo.

24.2.12

Historias de YO

Ante situaciones de tensión extrema los hay que encuentran consuelo en el chocolate, otros en el helado y YO en el queso. En las últimas semanas se hubiera comido al pakistaní de su barrio si alguien le hubiera fundido queso Cheddar por encima. YO se viste y para hacer prosperar cada capa se ve obligada a simular los movimientos de un luchador de sumo. Así consigue YO que le suba la faja antes conocida como braga, el pantalón y lo que consiga camuflar todo aquello que no justificaría ni el mejor guión de MAD MEN.
Leyó una vez que lo llamaban por venir porque no viene nunca. YO, que harta comer de hostias se ha vuelto mahometana, se ha especializado en ir a cazar montañas como otros persiguen huracanes o tormentas perfectas. Y ahora YO está decidida a ir a por aquello que está por venir para hacerlo llegar ya. YO es así. YO quiere ser así. YO está a punto de elegir sin marcha atrás ser así de modo constante. YO y Tú estáis aquí para verlo.

14.2.12

13.2.12

Magnify your happiness

No queda otra. Entusiasmarse. Buscar el lado bueno de las cosas. Atreverse a creer que se puede convencer a los otros de que los que aparentan generalmente, engañan.
Aprieta la mandíbula, mira a la pantalla, guarda silencio y ambos, mal que nos pese, nos mantenemos a la espera. Saturada. Harta. Semana de resoluciones. Semana de revoluciones. Lunes.

7.2.12

Pienso luego insisto

No encuentro mi azul. He pasado un rato en una tienda de bricolage mirando tipos de pintura, esmaltes de diferentes colores, en definitiva, distrayendo mi mente de los malos presagios. Y ahora tengo unas ganas feroces de desmontar los muebles de la cocina y sus tiradores. Quiero pintarlos de blanco y restaurar con esmalte color plata los pomos. El salón vendrá más tarde, cuando encuentre mi azul. QUizá resulte cómico pero pensar en pinturas, decoraciones, proyectos, me hace sentir útil. Me hace sentir que hay algo que puedo controlar. Ordena mi mente. Me da templanza. Con todo, parece que los últimos días hace menos frío. Necesito un descanso. Siento que me están moliendo a palos. Soporto la tensión porque tengo experiencia en funerales. Sin embargo, para todo hay comentarios superfluos. Estás en una nube, no deberías marcharte. Si estuviera en una nube sería un oso amoroso y no tengo el pelo cubierto de pelo de colores. Pienso en mi padre y en mi hermano, pienso en el tiempo lejos de ellos, en hacer que valga la pena, pienso luego insisto.

Kind of blue

6.2.12

Una habitación azul

Me apetece pintar el salón de azul oscuro, poner molduras blancas, añadir algún toque de verde lima. No es lo que la mayoría haría, es arriesgado, es poco convencional pero me apetece y no hago daño a nadie pretendiendo algo así. Claro que no estoy segura al 100% pero por qué hay que luchar tanto por cosas tan elementales. Los derechos fundamentales no detallan el caso pero estoy convencida de que lo contemplan.

1.2.12

El castillo de naipes


Trabajas en un castillo de naipes, un lugar donde nadie sabe a ciencia cierta de cuántas plantas se compone, cuánta gente lo habita. Caminas de perfil, con cuidado intentas no apoyarte en nadie porque sabes que trabajas en un castillo de naipes. Cumples las normas y no eres feliz. Cuando duermes sueñas que te conviertes en  una corriente descontrolada de aire que percute brutalmente contra el castillo de naipes. Por las mañanas te cuesta despertarte. No sabes qué o quién te espera en el castillo de naipes. Temes que caben un foso y no poder alcanzarlos; temes que caben un foso y no querer alcanzarlos. Ensayas suicidios mientras duermes. Eres un héroe que salta sobre los caimanes del foso. Comes cocodrilos, te haces botas con ellos. Te despiertas cuando te descubren con mala conciencia y corres, y corres a por tu castigo en el castillo de naipes.

31.1.12

Veta de aquí!!

Cumplen años y nos utilizan. Se han apropiado del espacio. Abusan de nuestros sentimientos. Se aferran a las baldosas y nos desafían. No, el armario no piensa abandonar la casa. No gira en su camino hacia la puerta de salida. Me obliga a mutilarlo o a alzarlo de nuevo. Pero no lo haré. Si lo elevo me arriesgo a que en el proceso se deje caer sobre mí y sea yo entonces la que acabe mutilada. No me fío de sus bisagras, de su falsa bondad de madera milenaria. Ya lo intentó hace días cuando quiso amenazarme en la sala rompiendo la luna de uno de sus espejos. No tuvo suerte. No me alcanzaron sus cristales. Supongo que debió ser frustrante. Supongo que por eso mordió rabioso el marco de la ventana mientras lo deslizaba sirviéndome del sofá hasta echarlo en el suelo. Por mucho que exhiba sus molduras de rancio abolengo, me la tiene jurada como un vil pandillero.
Voy a pedir refuerzos. Serán otros los que lo saquen de aquí. Se ha vuelto peligroso. Ha perdido la veta y me observa amenazante desde el pasillo mientras duermo. Veta. Me has hecho daño, Veta. Veta de aquí!!

30.1.12

Nosotros, que nos quisimos tanto

El salón en el dormitorio y el dormitorio en el salón. Cambio de escena. Una suite con galería donde la luz entra tamizada por la ventana; desayunar en un salon donde aprovechar al máximo la luz del día. Una apuesta por la claridad, por las reuniones con otros. Sin embargo, al salón aún se le nota que antes fue un espacio dedicado al sueño. Ahora la intimidad lo será más y la zona pública también. Cada cosa en su lugar.
Sin embargo, he luchado contra una nueva bestia, un armario de tres cuerpos y de más de 3 años, de cuando los muebles se hacían con madera sin reciclar y duraban épocas enteras. Un armario sin piezas. Un armario sólido, firme, que ahora descansa en el pasillo de la casa como un búfalo agonizante. De nuestro primer enfrentamiento no me quedan señales. En un par de ocasiones a punto estuve de quedar atrapada para siempre en aquella habitación sin posibilidad de escape. Y ahora nos queda la batalla última: salir del pasillo y avanzar hacia la calle. No sé si será posible. Será este martes, cuando anochezca. Ya os contaré entonces que ha sido de nosotros, que nos quisimos tanto.

23.1.12

Propósitos 2012

Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor
Una vida mejor

Una vida mejor

Una vida mejor

Una vida mejor

Una vida mejor

Una vida mejor

Una vida mejor antes de pasar a mejor vida.

9.1.12

Preparando la reentrada.


copy: Banksy

Sí, debería haberlo hecho antes, un post a lo feliz 2012 o algo así. Pero confieso que no ha sido posible. Después de superar de modo convincente las fiestas estoy dedicada a que mi reentrada en la atmósfera del día a día resulte lo menos trágica posible.  Disculpen las ausencias.