1.11.12

Muchacha enigmática

La muchacha de cabellera rizada
dijo que sus cabellos eran serpientes
invisibles para los demás
pero capaces
de escupir fuego invisible
que todo lo incendiaría.

No quedaron petrificados
sino que le administraron
la droga de la verdad
que casi siempre garantiza
que el paciente así tratado
dirá la verdad

Se cuenta que ella no se retractó
De aquella clínica sólo queda un montón de cenizas.

Erich Fried, Cien poemas apátridas.

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